Esta mañana en una de las sesiones individuales ponía como referencia a la planta de Orquídea para simbolizar que tenemos distintos ciclos en la vida y que esto está bien. Fue con las orquídeas que aprendí que no todo el tiempo voy a estar florecida, llena de vida, como tampoco todo el tiempo voy a sentirme sin vida. ¿Me sigues? Hay un momento para todo.
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No todos los días tengo la misma energía para hacer las cosas, no todos los días me siento con el mismo nivel de inspiración para muchas otras, no todos los días me siento felizzzz, no todos los días me siento florecida, no todos los días me siento vibrando alto, con ganas de bailar, cantar, meditar o cocinar. Algunos días me siento como “ahí”, algunos días me siento con la pila bajita, me siento como pérdida, algunos días me siento llena de nostalgia y muy existencial. ¿Y saben que?… ya no me quedo ahí enganchada ni preocupada por estar sintiéndome así, no lo juzgo porque sencillamente no hay nada que juzgar. No todos los días son iguales, no soy la misma todos los días y eso me gusta de estar viva! Amo y respeto mis ritmos, mis ciclos, mis momentos de luz e inspiración, tanto como mis momentos de oscuridad y temor.

¿Qué pasaría si dejaras de juzgarte por lo que estas sintiendo cada día?

Te dejo esa pregunta para que la medites contigo mismo 🙌🧙‍♀️